jueves, 15 de enero de 2015

No me den empleo

¿Cuántas horas se ha pasado en el tráfico rumbo a una entrevista de trabajo?

¿Cuántas horas en espera en la sala de algún despacho?

¿Cuántas veces se ha preguntado si "ahora si" lo van a contratar?

Cuando buscamos empleo lo hacemos con la esperanza, por encima de la realidad, de que pronto hemos de encontrar ésa oportunidad mágica en que se abren las puertas y rodeados de muchas sonrisas nos reciban en una empresa que nos respete y nos brinde el cobijo que necesitamos, para otorgarnos un salario que nos permita cubrir las necesidades básicas y un poco más.

¿Neto?

Bueno, de las búsquedas laborales que se pueden encontrar, el 80% son para menores de 35 años, por ende todo que haya nacido antes de 1980 está descartado, los salarios son en un 70% para alguien que cuyas necesidades no superen los 15 mil pesos y el crecimiento o posibilidades de permanencia en una empresa jamás es mencionado y rara es la vez que se ven promociones en el interior, ya que los vicios empresariales tratan de eliminarse con las contratación de gente "fresca" para puestos gerenciales.

¿Cuánto tiempo estaría en una empresa? ¿Cuántas veces quisiera quedarse hasta las 9 de la noche para sacar adelante un proyecto? ¿Cuántas veces ha recibido bonos por trabajar hasta las 9 de la noche?

Recuerdo constantemente un cuento que leí en la primaria, durante mucho tiempo he pensado que soy un lobo ¿Usted qué es?

Se los dejo, es breve.

El Lobo y el Perro

Era un Lobo, y estaba tan flaco, que no tenía más que piel y huesos: tan vigilantes andaban los perros de ganado. Encontró a un Perro, fortachón y radiante, que se había extraviado. Pensó en atacarlo y destrozarlo, cosa que hubiese hecho de buen grado el señor Lobo; pero había que emprender singular batalla, y el enemigo tenía pinta de defenderse bien.

El Lobo se le acerca con la mayor cortesía, entabla conversación con él, y lo felicita por sus buenos músculos.

—No estás tan guapo como yo, porque no quieres, contesta el Perro; deja el bosque; a los tuyos, que en el se esconden, son unos desdichados, muertos siempre de hambre.
¡Ni un bocado seguro! ¡Todo a la aventura! ¡Siempre en espera de lo que caiga! Sígueme, y tendrás mejor vida.
El Lobo contestó: ¿Y qué tendré que hacer?
—Casi nada— respondió el Perro, — lanzarse a los pordioseros y a los que llevan bastón o garrote; acariciar a los de casa, y complacer al amo. Con tan poco como esto, tendrás por retribución buena comida, las sobras de todas las comidas, huesos de pollo y pichón, y algunas caricias, por añadidura.
El Lobo, atento a lo que oía, se imaginó un porvenir de gloria, que le hizo llorar de gozo.
De camino, se dio cuenta que el Perro tenía en el cuello una peladura.
—¿Qué es eso? — le preguntó.
—Nada.
—¡Como que nada!
—Poca cosa.
—Algo es.
—Es la señal del collar al que estoy atado.
—¡Atado! —  Exclamó el Lobo; - pues ¿qué? , ¿No vas y vienes a donde quieres?
—No siempre, pero eso ¿qué importa?
—Importa tanto como que renuncio a tu buena comida, y hasta renunciaría al mayor tesoro por ese precio.
Y el Lobo echó a correr. Y aún sigue corriendo.
Jean de la Fontaine, Fabulas escogidas

martes, 13 de enero de 2015

Es una Barbie

Dentro de la crianza se escuchan rumores, muchas historias aterradoras nos llegan por lo medios (el que sea) a irrumpir en la paz de nuestra conciencia, hoy me puse a pensar.

¿Qué onda con las Barbies?

He escuchado a varios personajes (declarados enemigos acérrimos) de las muñecas Barbies y de las princesas, hablar sobre lo "malas" que son para las niñas y su autoimagen, sobre las primeras es que decidí preguntar a mi hija de 5 años lo siguiente.

- ¿El cuerpo de esta muñeca es igual al de mami?
- No.
- Es diferente, entonces ¿Cuando crezcas cómo va a ser tu cuerpo?
- Como el de mami.
- ¿No va a ser como el de ella? - Señalé a una muñeca.
- No.
- ¿Por qué?
- Porque es una Barbie.
- Gracias.
- ¿Tu no lo sabias?
- Yo lo sé, pero hay quienes no lo creen.

Tal diálogo, tan inteligente, tan claro no me dejo dudas. La sospecha cuasi científica de que las niñas crecen con trastornos alimenticios y de comprensión sobre su imagen propia y que las orilla a la bulimia y anorexia, no son más que PATRAÑAS. A menos que usted DE VERDAD sea un muy mal padre, o su hijo esté completamente trastornado, jamás va a esperar crecer como una Barbie, así que por favor, deje de molestar con semejantes teorías a sus amigos. Los niños son inteligentes y se dejan guiar, aprenda a guiarlos.

Un propósito de año diferente

Con el año nuevo parece que con el año nuevo nos planteamos los propósitos más comunes, tan comunes que no parecen propios si no masivos, como propósitos de año nuevo de hace 5 o 10 años, bajar de peso, viajar, aprender algún idioma, hacer una maestría o al menos titularse, son las metas que la mayor parte de la gente desea realizar, muchos de ellos se logran muchos (los más) se olvidan.

En ésta nota decido fomentar un propósito, que no es de lo más común, no es famoso, de hecho es de esos de los que no le gusta hablar a la gente.

¿Conoce usted casos de tíos o parientes que nunca veía porque eran muy raros?

Que vivían en el cuarto, alejados de todos, que no se aparecían en las fiestas familiares, con los que no conversan casi nunca, de los que no saben ni como viven, o de qué viven. Los raros, los freaks, los que dan miedo, los que de algún modo provocan un poco de "penita" porque no saben nada de ellos, y que sólo frecuentan a su círculo más cercano, a los que no les conocen amigos y si llegan a tener parejas usted se pregunta frecuentemente ¿cómo?

En México el porcentaje de personas con trastornos prisquiatricos es muy alto, es bastante usual escuchar a adolescente habla sobre bipolaridad cuando cambian de opinión constantemente, sin embargo la mayor parte de quienes hablan a la ligera sobre bipolaridad no tiene idea de qué habla.

Éste año le propongo acercarse a la persona con trastornos psiquiatricos más cerca a usted, ¿sabe porque?, porque la mayor parte del tiempo buscamos por instinto evadir a aquellos que no son tan "normales" como nosotros, viviendo en nuestro entorno social



El soundtrack de tu vida

Hay un programa de radio que pasa en una estación de jazz, en el que hablan de el soundtrack de personajes de la cultura y/o conocidos de...