miércoles, 10 de noviembre de 2010

Sudor

Presento una breve historia, de las que te guiñan el ojo y te sacan el arrobo. Cariño.

Sudor

Mientras se viste de prisa el sudor resbala entre sus muslos, la propia consciencia le mira con recelo, camine a cualquier lado sentirá la nostalgia por la poca o mucha vida que se le ha escapado entre las piernas, entre cada suspiro sobre el colchón.


Dirás no eres la puta que te pensabas, que soy distinta porque me has encontrado en una casa extraña no en el frío de una avenida. No es necesario el pago en efectivo las monedas de nada valen, esta culpa es pago a largo plazo y voy a tener intereses extraordinarios, porque apenas me conocerás y de mi no has de olvidarte!  que soy el reflejo de tu soledad. Tal vez me sienta sola cuando te vayas tras haberte deseado tanto, pero he de dejar atrás el remordimiento moralino que no cubre las expectativas del romance, que no todo el romance es el cuadro barato de la novela televisiva, y sabrás que no veo novelas, pero te veo a ti irte con prisa y buscando en tus ropas esa vergüenza pérdida, la que te colgaron las mujeres de tu casa que no dejaron de mostrarte el sendero del respeto a su sexo : "No te acuestes con ellas sino vas a quedarte, no seas miserable, llena la cama de rosas y la alcoba de promesas, di a esas mujeres que volverás con el anillo de matrimonio, la boda y los hijos".

Eso ha dicho y yo respondo: no soy ellas, deja esa culpa, ya que no te deja tener orgasmos sin pensar en lo mal que haces sintiendo tan bien, conmigo no tienes que quedarte a hacer una vida , no te estaba esperando. Nos hemos tocado y ahora, a otro lado.

martes, 9 de noviembre de 2010

Y... ¿Qué harás con tus hijos? - una entrevista laboral que caería en la discriminación

Recientemente me presente a una entrevista, muy sofisticada yo, muy calculada y todo, con los tropezones que se tienen al no pasarse la vida en búsquedas laborales, soy sincera, el romanticismo económico es una utopia y no puede uno vivir de colectar frutas en su huerto. Aceptando esto, me presente en una entrevista para un "posible" puesto, una vacante no aprobada; durante la entrevista me preguntaron en cierto momento: ¿Tienes hijos, no?, ¿de qué edades?, ¿Estas bien con la idea de dejarlos para trabajar?, ¿Cómo lo harías?, ¿No te afectaría irte a otro estado?.... Tras ello me preguntaron ¿qué tal tu ingles? Y ya.

¿Qué hubiese sucedido si yo fuera hombre?, ¿hubieran existido estas 6 preguntas respecto a la logística de ser madre y trabajar en un puesto ejecutivo?, si los resultados se basan en mi capacidad de desligue de la maternidad, puede ser que salga avante, pues mostré mucha seguridad, pero las preguntas tan insistente me recordaron otra entrevista hace años, previa a casarme, ¿piensas casarte?, ¿pronto?, ¿hijos?. Y ahora que mis hijos duermen me repito... Hay que pagar escuelas y comida, caray, y entonces el desligue no suena tan mal, pero neto ¿pensaría en ello si yo fuera hombre?.

Pensé en denunciar a la empresa a la CONAPRED, y mandar un correo a la matriz de la reclutadora en Estados Unidos, y en ello me debato, no es porque sea una feminista, que sí lo soy, pero sobre todo, soy madre y deseo un mejor lugar para mis hijas, sin discriminación por ser mujer y sin temor de serlo en cada etapa de su vida. Buen día.

jueves, 7 de octubre de 2010

Infidelidad intelectual en las redes sociales

Recientemente escuche a una terapeuta decir : "infidelidad por Messenger es infidelidad a fin de cuentas", entonces me pregunte, ¿Qué tan fieles somos en las redes sociales?, y no es que me refiere de manera única y flamigera a aquellos que entablan relaciones amorosas "virtuales/nosconocemos/tenemossexo", si no a aquellas "infidelidades" intelectuales... Me explico, conozco personas cuyas parejas no leen ni la etiqueta del champú, o que leen revistas de espectáculos, y que miran con amargura que no pueden compartir el gusto por ver ciertos programas o libros, ciertos temas o conversaciones nunca llegan a darse con su pareja, y la frustración existe  y se desboca en las redes sociales, en donde hay muchos lugares a los cuales acudir para encontrar la satisfacción que les brinda una conversación entretenida, un comentario acertivo,  un poco de reconocimiento acerca de aquel tema que en casa resulta vetado... ¿Estamos siendo infieles? ¿Es valida esta doble vida intelectual? ¿Estas redes sociales se convierten en bastión de nuestro individualismo y refrendo de nuestro propio ser?... ¿Usted qué piensa, querido lector?

miércoles, 6 de octubre de 2010

Hablando de analistas

Por la mañana en un noticiero escuchaba a Jorge Castañeda, quien acerca de cierto tema, mencionaba a los "pseudoanalistas", la definición que dio era la siguiente: "aquellos que por la mañana leen un periódico en Nueva York o Londres y repiten lo que han leído, como si ser analista fuera decir 'yo me entere primero' y ahora se los digo a ustedes". 

Valga tal definición para para la #prensagadgetera. Se espera que alguien que publica en medios sea capaz de hilar dos pensamientos que no sean "comunes", si bien no se trata de aplicar la regla de los 6 grados, al menos esperamos un poco de esfuerzo de aquellos llamados "analistas".  Valga de nuevo para la #prensagadgetera

martes, 5 de octubre de 2010

Pies que miran

Mirando los pies, con dudas.... mirando sin parar las uñas para recordar que siguen ahí, aunque pocas veces salga de la habitación, no deja de imaginar que esos regordetes dedos le recriminan estar sin ver el sol, o restregarse en la playa, caramba, si a veces parece que se desquitan provocando ardores extraños o incluso piquetes sorpresivos, que le llevan a tirar el café sobre la silla. Por tales cosas es que los mira uno a uno, con tanto cuidado como sus ojos cansados tras los lentes antireflejantes puedan hacerlo; sí, sospecha de ellos, tal vez un día salgan corriendo sin avisarle si quiera, y no es que esté esperando un memorándum, pero al menos una señal con tiempo previo, para darse tiempo de dar "Save" a el documento que este trabajando... Al menos "Save".

martes, 10 de agosto de 2010

Extraño caso de cambio de identidad

Sí, hay casos extraños que no notamos, casos extraños, repito y hay uno muy especial, el del cambio de identidad, no se sabe si fue un robo o un malentendido, pero el caso comenzó como un mito... Y es el

Increíble caso de confusión de

Ay
Hay
Ahí

Comenzó por la perdida de "Ay" como expresión de lamento, fue sustituida de manera sospechosa por "Hay", de manera sigilosa, se sospecha de ella en especial porque la h... es muda. Poco después de tal hecho, se inicio una propagación masiva de la falsa identidad, pero se dice que todo en esta vida se paga, así que los días fáciles de "Hay" se terminaron pues fue sustituida casi tan sigilosamente como lo había hecho y con un poco más de discreción pues ahora la H se había movido de lugar y había de colocarse estratégicamente en medio para aprovechar al máximo su mudes... Comenzó la utilidad de: "Ahi" y hemos de mencionar con cierto horror, que "Ahí" no tuvo empacho alguno en quitarse el acento, y convertirse en uno de los mayores casos de robo de identidad, ahora, en este mundo turbulento nadie sabe, nadie supo y jamás sabrá la verdadera historia de:
Ay
Hay y
Ahí

Atte.

Grupo en favor del respeto a la identidad de las palabra.

Que tenga un buen día.

sábado, 17 de julio de 2010

El auto amarillo

Confesión de las 8:54 del sábado: Mi primera auto fue uno koreano "amarillo".

Hoy reflexionaba acerca del los automóviles, y de cómo es que crecemos y cambiamos de perspectivas conforme avanza la edad, me parece que todos pensamos alguna vez que el vochito amarillo canario, el azul alberca o el rojo convertible serían los autos que nos conducirían a la universidad, la primera cita, o el primer empleo, y para muchos así fue, salvo que no siempre eran VW; con la globalización las alternativas se ampliaron y el auto económico inundó las calles, y en muchas ocasiones... la versión "amarilla" seguía vigente, pero ... ¿Qué es esto del auto amarillo?

Bueno, es una ensoñación de adolescente, porque los adolescentes se aferran a mostrar su identidad y salvo que se sea fan de un muscle car (algunos también usan el color amarillo) la etapa del "auto amarillo" se apodera de el recién estrenado universitario y sus primeros salarios dan para que lo compre... la esperanza es que algún día compre un auto de adulto, lo que nos lleva a otro detalle .. ¿En verdad queremos crecer? Esto es un tema que he tratado previamente, los peter-panes, los autos amarillos, los calzones de Hello Kitty aparecen en todos los aparadores de las tiendas y me pregunto ¿Qué afán? ¿Cuando nos pareció tan terrible convertirnos en adultos?; miro recientemente Husband & Wifes de Woody Allen y noto algo nuevo... ¡conozco los temas de los que hablan en las discusiones y no por es chisme! Y es que sí, tal película de 1985 trata de problemas de adultos.... problemas que me ha tocado vivir o ver vivir y entonces, miro alrededor... cuando trato de comprar ropa interior SÓLO hay de Tinkerbell y dibujos animados en las "boutiques".

He llegado a una etapa de mi vida en que la adolescencia me encanta en otros, pero hoy más que nunca me gusto como mujer de treinta y tantos, no tengo miedo a los 40 (aún) y me fascina tener amigos de 50 años y deseo poder hacer más cosas de las que he hecho, pero más en el sentido de una buena fiesta con meseros y vino espumoso, y menos en el sentido de una fiesta de caguamas y ceniceros con chicles pegados ¿Me explico?... Ay sí, sé que sueno a aburrida señora de flojera... pero creo que soy mucho más sexy ahora que a los 23... y gracias a Dios ya no uso rompa con estampados infantiles y prefiero el encaje que el algodón, el vino tinto a las caguamas y un auto de adulto (ñora) a un pequeño-compacto auto amarillo.

Buena noche.

lunes, 12 de julio de 2010

infiel

Hace muchos años, escuché de un hombre: "A mi mujer no le falta nada"... Eso antes de ser infiel. ¿Qué nos falta cuando pensamos en serlo?, la vida no es un sitcom, pero constantemente lo olvidamos, de no ser porque no hay risas grabadas, hasta pensaríamos que el guión lo escribió otra persona, pero, cómo me lo dijo "85" en medio de cierta crisis: debes dejar de culpar a los demás por tus acciones (tnks).

Si nos falta pasión, romance, lujuria en el matrimonio, lo más difícil es quedarse, sí y lo más inteligente es "pedir" lo que no se tiene, pero siendo honestos, los oídos sordos no son pocos y eso de que "pidas y se te concederá" la más de las veces nos lleva las situaciones más vergonzosas imaginables. Y al final, no se concede y entoncés aparece la "puerta falsa"... Que ni es falsa ni es puerta, sólo buscamos eso que el matrimonio no nos dá y que pocas veces regresa. Terapeutas afirman que es mejor terminar la relación actual antes de ser infiel... Sí, pero eso no sucede, y entonces nos amarramos las piernitas y volteamos los ojos a ver que nos compensa la relación, pero al final: siempre estamos solos. Y el otro... ¿Qué piensa? Cuando se niegan las peticiones de sexo, la pregunta no es sólo para aquel que desea ser infiel, tambien para la pareja que "inocentemente" dice que "no entiende qué paso...". Pasó que no pasó nada.

Cada quien es responsable de sus acciones, y de cerrar o abrir sus piernitas, pero sería bueno que unos abrieran más y otros no, que se piense qué es lo que sostiene la relación y si se es feliz, que a fin de cuentas, es lo que importa, ¿no?.

jueves, 18 de febrero de 2010

Twitter... ¿se siente como en la secundaria?

Cada vez que inicio Twitter me queda una extraña sensación, algún recuerdo de la adolescencia o de mi periodo escolar, esa sensación se consolido cuando un amigo me dio su razón para no usar Twitter: Yo no tengo fans. Claro que le dije que yo seria su seguidora (léase "fan") pero mi sensación fue acrecentando y ahora trato de explicarla.

¿Cuantos "Followers" tiene usted en Twitter? Entre ellos, estarán sus amigos y muy posiblemente algunos personajes públicos que en algún deseo de democratización y afán de reciprocidad del Twitter le dieron "Follow" a las primeras personas que lo siguieron. He aquí unos ejemplos. 




En el mejor de los casos hay una relación 1 a 100 entre "Follows" y "Followers". Evidentemente es iluso pensar (y no, por favor, que no es reproche) que alguien que tiene miles de fans los lea a todos y solo aquellos que llegaron primero a seguir a alguien serán seguidos y los que por sus comentarios obtienen notoriedad figuraran en las listas de los "Follows" de algún "Twittstar", porque sí, Twitter es un sistema de creación de estrellas y clubs de fans masivos. Sin embargo en el fondo ¿no siente usted que al estar en Twitter está en la secundaria? Tal vez soy sólo yo, pero de pronto es como si recogiera todos los papelitos que se enviaban "secretamente" entre las bancas del salón de clases, en los que confesaban amor, criticaban ropa, cabello, peso, nalga, novio... Los chicos de ahora ya no escriben a mano, las notitas que nos pasábamos mano a mano ahora se publican en Twitter y la intimidad se ve arrastrada por los suelos, pero eso sí, en un afán democratizador porque TODO mundo puede tener Twitter (siempre que entienda y acceda a internet), pero pareciera un concurso de popularidad... Sí, los "Twittstar" dominarán el medio y tal vez, los fans se aburran de que no les responden o que los chistes se vuelven incomprensibles al tipo "RT RT @monito2 @monito2a ja//esta ca..//ya?/va/bue/tu dices." Amm... ¿Que?, sería necesario pedir un poco de respeto de parte de los Twittstar a sus Followers, además del RT hay DM y cuando ya es ping-pong, no hay reta. 

Abrazos desde la tierra de lluvia y temblores rítmicos.

martes, 5 de enero de 2010

Derecho de luchar

¿Cuantas veces nos hemos tirado al drama, quejándonos lastimeramente de lo que nos sucede?, ya sea en el trabajo, con las parejas, con aquello que nos quita el sueño o que nos hace sentir abrumados hasta la derrota. Pequeños o grandes problemas que causan dudas, infiltraciones emocionales en las paredes de nuestra mente. Eso que te dices... no puedo más, llamas a tus padres para decirles que no puedes más, a tus amigos por decimotercera ocasión para decirles a moco tendido: ¡No puedo más!... y al día siguiente te sonríes y dices... next.

Sí y no es next hacia la dirección -> sáquenme de aquí. Sino un next en la dirección, bueno, voy a quedarme a combatir este problema y obtener una solución que me satisfaga, no se diga para toda la vida, dígase que me satisfaga el día de hoy, que me deje contenta el día de hoy... aunque mañana llame a mis padres de nuevo para decirles ¡No puedo más! y mis amigos reciban la llamada decimocuarta... Se llama deseo a luchar, un derecho que parece que nosotros nos negamos TODO el tiempo. Cosa tan curiosa, a la primera dificultad nos quejamos y llevamos a todos los que nos rodean al hartazgo con "la misma canción" y entones comienzan los juicios... ¡Si te quejas me das el derecho a juzgarte y decirte cuan mal estás por seguir ahí! ¿Saben que?... No, no, no... ése derecho de juicio no existe, no es un derecho adquirido al ser receptor de las quejas del otro, porque a veces sólo se desea ser escuchado y tal vez no sentirse sólo en lo abrumado, pero ¿porque nos gusta quejarnos?... No lo sé, pero creo que es válido el derecho a quejarse tanto cómo el de la otra persona a decir: ¿Sabes que?, te quiero mucho, hablamos cuando estés mejor. Y es tan válido a decidir luchar.

Hace unas semanas una querida amiga me comentaba que regresaba con su ex, de quien estaba separada hace varios meses, tienen hijos y me contaba que era tan doloroso ver cómo sufrían al ver que debían irse por caminos separados cada fin de semana, sus palabras fueron : "Por ellos vale la pena intentarlo mil veces". Eso es el derecho a la lucha. Tiempo de respetarlo y validarlo, porque nadie más que quien lo vive puede hablar sobre lo feliz que lo hace sentir, porque es cierto, si bien nos quejamos cuando las cosas están mal, cuando estamos bien no hacemos mucho ruido y la gente cree que nunca sucede, es hora de hacer más ruido cuando estamos contentos de nuestras decisiones, así nos miren de arriba a abajo y nos digan que siempre tropezaremos con la misma piedra.. ¡Sí! Esa piedra es nuestra y la hemos elegido.

domingo, 3 de enero de 2010

Sobre las horas

Ayer después de algunos años de su lanzamiento, pude ver "Las horas", la película, la ví en HBO o Cinemax o MovieCity, no sé, alguna de esas cadenas la presento y por fin pude verla, parte de mi actualización cinematográfica tras algunos años de escasas visitas al cine.

No hablaré de la película, salvo de la "extraña" Virgina Woolf al hablar de sus personajes, con la pasión de quien es fanático de las series televisivas y repasa en su cabeza cada capítulo repitiendo los diálogos, incluso cuando está acompañado, lo que hace pensar a quienes se sientan a su lado que está loco o no cuenta los chistes a nadie más... eso o habla con ángeles - (mi hermana usó esa frase el 1o. de enero cuando mi hija se río sola)-.

Entonces me pregunté si no es miedo lo que me impide escribir, sí, miedo a entrar en esos laberintos que se ven en la película y que no desconozco, esos laberintos oscuros, como las escarpadas montañas de los Cárpatos, en que la única forma de salir es guiándose por la luna llena, que helada nos vuelve pálidos. Es que no es sencillo para mi entrar en tal estado de exitación, de enajenación siendo madre, porque no es cómo salir del trabajo, subir al auto y llegar a casa a ver a Dora la Exploradora, no es tan fácil dar la vuelta o al menos a mi no me resulta sencillo, eso de ir y venir entre la pureza de la infancia y lo contrario que sea ser adulto y hablar de cosas dolorosas para cualquiera adulto. ¡Ah Dios! Que difícil es este bloqueo electivo.

El soundtrack de tu vida

Hay un programa de radio que pasa en una estación de jazz, en el que hablan de el soundtrack de personajes de la cultura y/o conocidos de...