viernes, 4 de diciembre de 2015

Acerca del artista


Hace poco en una entrevista de radio escuche a un par de jóvenes escritoras que declaraban a pregunta del conductor del programa ¿Que les significaba ser escritoras?.

Las respuestas me sorprendieron tanto por su alta capacidad de auto compasión cómo  por estar llenas de clichés acerca de la profesión de escritores a la cual llamaban: "oficio". Una de estas respuesta fue mencionar el rechazo de la familia ante algo que no era considerado carrera o profesión. También declararon que renunciaban a la seguridad y al hecho de ser madres o esposas o tener dinero. No es que esté yo a favor del dinero como razón de vida, ni que sostenga que la maternidad esta por encima de todas las razones de ser de una mujer, sin embargo, ¿Es el único camino del artista convertirse en una anacrónico estándar?.

No lo creo... Lo que más me preocupo de estas jovencitas es que estaban seguras en su afirmación acerca de que la vida sería la más miserable, que jamás tendrían éxito cómo escritoras y que se tomasen tan en serio las declaraciones familiares acerca de su "irresponsabilidad" en la vida. Y es que parece no tomarse en serio la profesión de el escritor o del artista ni siquiera por el pretendido artista. La auto compasión la falta de metas y la falta de una estructura de vida es lo que pareciera definir la vida del creador.

Los casos de artistas como Pollock, que se tomaron el papel del artista afligido, sujetos a las vicisitudes de la vida, entrando y saliendo de dramas psicológicos y de egolatría me aterran ¿está el artista condenado al suplicio por el hecho de ser artista? ¿Todos somos Marga López?

Qu ser artista de cualquier disciplina no es fácil es de todos conocidos, pasan años antes de que exista reconocimiento, que la envidia y los golpes bajo están a la orden del día, que el dinero no abunda y que las buenas relaciones, cuna y amistades cuenta. Pero antes de eso está la intención de ser artista, ¿no?

Si bien al ser artista hay que buscar el sustento de lo que se pueda sin abandonar el deseo de ser artista (sobre todo si se desea vivir en el medio de un modo reconocido), o se tengan que tomar profesiones u oficios alternos para subsistir de un modo decoroso implica la responsabilidad del mismo como un adulto, no se puede vivir del estado por medio de becas  o patrocinios que en muchos niveles nulifican la labor creadora al direccionarla hacia alguna tendencia de moda o peor aún hacia la obra de un artista "reconocido" y que pague por que le hagamos su labor creativa. Es hora de que el artist nobel, se plante frente al mundo con la actitud de un profesionista, la que le indica que pase lo que pase deberá ser aún más disciplinado y trabajar en las horas que el resto del mundo duerme para poder continuar con la labor creativa con comida y techo.

Tal responsabilidad parece ser el "coco" del creador, que mira con desprecio a aquel que tiene que vender zapatos de día para poder escribir de noche, acusándolo de vendido, de mediocre y  ajeno al cliché del artista que muere de hambre esperando que algún editor halle su obra póstuma. ¿Estamos dispuestos para seguir así o deseamos instalar en la sociedad la idea de un artista responsable que pueda pagar sus deudas?

2005

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